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Texto
Nuestra sociedad está constituida por variedad de pueblos con sus respectivas culturas, por pueblos diferentes. También lo está la Iglesia. Queremos tomar conciencia de que tanto la sociedad con sus instituciones como las mismas iglesias están siendo interpeladas por estos pueblos culturalmente diversos.
¿Tienen derechos estos pueblos, como pueblos, no sólo los individuos como ciudadanos, al interior de la sociedad y de la Iglesia? ¿Cuáles son sus derechos? ¿Qué cambios debe hacer, en concreto, nuestra Iglesia en su manera de ser y en su quehacer, para responder a los derechos de los distintos pueblos que viven en su interior o a los que sirve? ¿Qué campos de la Iglesia habría que repensar para que estos pueblos sean sujetos y no sólo participantes o, peor aún, destinatarios de la acción de la Iglesia?
Si preguntamos a la gente las respuestas serán varias. Un compañero preguntó en Baja Verapaz cómo se veía la pastoral y la postura de la Iglesia en relación con el pueblo achí y la mayor parte de las respuestas no tenían en cuenta la cultura sino si “ahora somos menos ignorantes, hay mayor participación en la Iglesia, se valora más la eucaristía y se conoce la Palabra de Dios”. Y un pequeño grupo hizo notar como positivo el uso del propio idioma en la liturgia y la valoración de las costumbres autóctonas y reclamo que no se esté haciendo más.
En Guatemala ya se van oyendo planteamientos variados al respecto, muy diferentes dependiendo del sector que representen. Algunos muy a la defensiva como quien teme que se revuelvan aguas que nos lleven a situaciones muy dolorosas. Otras, más habladas que escritas, reclamando el derecho a ser diferente, a no tener que dejar de ser uno mismo para ser “ciudadano”, guatemalteco. Otras, más académicas, con estudios históricos, sociológicos o interdisciplinares.
Como centro Ak’ Kutan hemos querido reflexionar sobre las identidades y los sujetos culturales porque no solamente nos parece justo sino absolutamente necesario para todos.
En este Texto Ak’ Kutan encontrará usted los trabajos de reflexión de un taller realizado en el mes de mayo en Cobán. También nos pareció oportuno rescatar dos trabajos de V coloquio Teológico dominicano celebrado en Chile en el año 1996 con el tema: Los pueblos excluidos ¿sujetos culturales? El primero de ellos a partir de la realidad de los pueblos mayas y el segundo de los pueblos del sur andino. Fernando Suazo reclama de manera especial el derecho del pueblo maya a su memoria. Jesús Tapuerca enfatiza el derecho del indígena a ser sujeto cultural, no sólo actor, y las consecuencias que ello tiene para la Iglesia. Para terminar recogemos los apuntes que hicimos como grupo, en el taller, aplicándolo a la Iglesia de Verapaz
Sabemos que el tema necesita mayor reflexión, sobre todo que todos los sectores implicados participen en la discusión. Por nuestra parte queremos dar nuestro aporte. Gracias por tenernos en cuenta.
